Es un lugar mágico. 62.000 hectáreas de tierras salvajes pero perfectamente cuidadas por un equipo de 180 profesionales desde guardas, seguridad, veterinarios, gerencia, camareros, chefs, servicio de limpieza que son realmente adorables en todo la amplitud del término, además de excepcionales profesionales.
Las instalaciones son impecables teniendo en cuenta que están en medio de la naturaleza pero a tiro de piedra de Cape Town (2 horas y media de viaje en coche). Los guías son unos apasionados de la naturaleza fauna y flora y se lo saben todo.
Hay lugares más salvajes quizás más lujosos pero no tan cerca de una gran ciudad y desde luego con un equipo tan extraordinario como el de Sambona.