Personal amable y hablan español, cosa que se agradece como turistas. Al reservar aclaramos que llegaríamos alrededor de media noche y sí se nos respetó nuestra habitación.
Reservamos por medio de Expedia y aunque elegimos la opción de pagar directamente a nuestra llegada; al momento de hacer check-in, el cobro se hace de forma automática a la tarjeta que hayas puesto en la reservación. No es gran problema, pero sí para tomarlo a consideración para quienes prefieren manejar efectivo.
Nuestra llegada fue casi a media noche y vimos a otros huéspedes con mala pinta, tomando en el estacionamiento y moviendo sus autos. Aunque al principio nos preocupó porque viajamos en familia, realmente no tuvimos problema y una vez dentro de la habitación no hubo ruidos o aparente peligro.
La habitación visualmente estaba limpia, amplia y moderna; sin embargo, olía mucho a orines. Cómo viajamos con nuestra hija y ya era muy noche, no quisimos quejarnos porque lo que necesitábamos inmediatamente era dormir. Nos arrepentimos de no haber dicho nada para ver la probabilidad de cambiarnos de cuarto, porque el olor era muy fuerte.
Realmente la habitación se veía limpia, pero probablemente el olor se debía a que aceptan mascotas y estuviera impregnado en el piso. Las camas y las sábanas se veían y olían limpias.
Fuimos a Universal y este motel salía más barato que otros lugares más cercanos. Quedó perfecto, hicimos alrededor de 25 minutos y en el camino hay donde desayunar desde muy temprano.